Es muy probable que, en los últimos años, hayas escuchado hablar en numerosas ocasiones de un sistema que se instala cada vez con más frecuencia en algunos automóviles: el Launch Control. Hasta hace poco, el control de asistencia de salida sólo se utilizaba en superdeportivos y deportivos de lujo, pero su creciente popularidad ha incitado a muchas marcas a equiparlo en sus modelos más accesibles. Por tanto, existe la posibilidad de que llegue el momento en el que tengáis que elegir si queréis que vuestro nuevo vehículo tenga esta tecnología o no. Como siempre es mejor estar informado, aquí os explicamos qué es el Launch Control, cómo funciona y para qué sirve.
¿Qué es el Launch Control?
Como gran parte de las innovaciones actuales de nuestros automóviles, esta ayuda electrónica tiene como origen el mundo de la competición. En las carreras, realizar un buena y rápida salida era y sigue siendo de gran importancia, independientemente de la modalidad en la que se esté compitiendo. Por esta razón, los pilotos realizaban antiguamente un técnica que consistía en revolucionar el coche hasta un régimen determinado de rpm, buscando el punto en el que el motor transfería una cantidad adecuada de par y potencia a las ruedas. A simple vista parece algo sencillo, pero es importante tener en cuenta que pasarse puede provocar que el coche pierda tracción y que las ruedas patinen, con la consiguiente pérdida de tiempo que eso conlleva. La conclusión es que llevar a cabo una lanzada perfecta no era precisamente moco de pavo, por lo que requería de cierta habilidad.
Con el tiempo, las mejoras tecnológicas (principalmente electrónicas) de los automóviles permitieron a los ingenieros desarrollar un sistema que podía realizar esta acción de manera automática y controlada sin que el conductor tuviese que preocuparse de nada. En ese momento nació el Launch Control (cuyo significado en español sería Control de salida o lanzada si lo traducimos literalmente del inglés), la ayuda electrónica responsable de que algunos deportivos actuales puedan realizar el 0 a 100 km/h en tiempo récord. Por tanto, la respuesta a le pregunta de para qué sirve este sistema resulta sencilla: para mejorar el tiempo de salida desde parado de un vehículo.
¿Cómo funciona el Launch Control?
Una vez explicado su origen y su objetivo, es hora de saber cómo funciona. Gran parte de la magia de esta tecnología reside en la correcta combinación y coordinación de otros controles y sistemas electrónicos equipados en el coche como el ABS, el control de tracción, la caja de cambios automática y la centralita. Así, el Launch Control no proviene de una pieza que pueda instalarse, sino que es más bien una modificación del software de la ECU. En lo que respecta a la forma de activarlo, suele haber diferencias de un coche a otro. Hay casos, como el del Renault Megane RS, en el que es realmente sencillo, ya que únicamente se debe presionar las levas a la vez durante unos segundos para ponerlo en marcha. En otros casos, es necesario escoger el modo más deportivo, desactivar el control de tracción, cambiar la caja de cambios a modo manual (en las automáticas) y pisar el freno.
Una vez realizado el ritual, el control queda activado y comienza la acción. Es el momento de pisar el acelerador a fondo, lo que provocará que el motor se sitúe en el régimen de vueltas adecuado, que suele estar entre las 3000 y las 5000 rpm. Algunos automóviles con motores turboalimentados combinan en este punto el Launch Control con el sistema anti-lag, aumentando así la densidad de los gases de escape y eliminando el posible retardo del turbo. Pero la cosa no termina aquí, ya que una vez que la potencia del motor se transfiera al eje motriz (o a los ejes si es tracción total), lo más normal es que las ruedas tiendan a perder tracción. En este momento entrará el ABS (sistema de antibloqueo) frenando las ruedas que patinen, pero a la vez permitiendo que se den algunas pérdidas de tracción pequeñas para que haya un equilibrio entre la transferencia de potencia y el agarre. Esto también permite equilibrar el peso del vehículo para evitar que se pierda el control de este.
La implantación del Launch Control es cada vez más popular y lo normal es que siga creciendo en los próximos años. Las marcas de superdeportivos como Ferrari o Lamborghini llevan tiempo ofreciendo sus vehículos con este sistema, pero son muchos los modelos de compañías como Audi o BMW que poseen este equipamiento de serie. Incluso firmas como Renault o Ford empiezan a ofrecerlo como un extra opcional. Eso sí, hay que tener en cuenta que no es necesario para el día a día y que puede llegar a desgastar los distintos componentes del vehículo. De hecho, la utilización del Launch Control en las primeras generaciones del Nissan GTR anulaba la garantía del fabricante, debido a los posibles problemas que pudiese ocasionar en la transmisión u otros componentes. De todos modos, la tecnología ha mejorado y avanzado mucho, por lo que no hay nada que indique que este sistema no pueda usarse en coches de corte deportivo. Alguna alegría tendrán que darnos los fabricantes a los apasionados de los coches, ¿no?
