En 2020, BMW dará a luz un nuevo retoño, la séptima generación del M3. Y aunque de momento están sometiendo al vehículo a ciertas pruebas en carretera abierta, pero con camuflaje encima para evitar a “curiosos”, se han desvelados ya algunos detalles de lo que podemos esperar sobre la nueva versión deportiva del BMW Serie 3. Por ejemplo, se estima que saldrá en año y medio a la venta acompañado por la nueva versión del M4, con el que compartirá base técnica.
BMW Motorsport se ha puesto las pilas pero de verdad y, para fabricar un M3 en condiciones, no podía prescindir del cambio de marchas manual (cosa que también ha hecho en el M4). Sí, porque pese a que la evolución del mercado nos haga claudicar al cambio automático, todavía queda esperanza para los más puritanos. Y es que tiene por delante una durísima competencia con modelos como el Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio y el Audi RS4. Si quiere recuperarse como la absoluta referencia, debe marcar la diferencia y el Giulia QV concretamente se lo ha puesto verdaderamente difícil.
Nos encontraremos con un vehículo más ligero que el M3 CS actual, gracias a la plataforma CLAR, lo que limita el peso en aproximadamente 1.585 kilos. A esto hay que añadirle la gran cantidad de piezas fabricadas en fibra de carbono, como pro ejemplo el techo. Contará con un motor de 6 cilindros en línea de 3.0 litros y doble turbo que dotará al M3 de unos 465 CV de potencia. No queda muy claro si incorporará el sistema de tracción a las cuatro ruedas M xDrive, aunque todo apunta a que esta opción ha sido descartada por temas de reducción de peso. También se ha desechado la posibilidad de que presente algún tipo de electrificación, por lo que será un coche combustión al cien por cien.
El M3 2020 será, con casi total certeza, el último modelo M que empleará única y exclusivamente un motor de gasolina, ya que se espera que todos los deportivos venideros de la compañía germana empiecen a utilizar también sistemas eléctricos de aquí a no mucho.
